Deborah Ochoa, viuda de Benito Castro, asegura que el actor no expresó cuál era su última voluntad, pues no esperaba partir tan pronto. Sin embargo, solo pedía que le cumplieran una cosa cuando muriera.
Por Josué Olvera.
Deborah Ochoa, viuda de Benito Castro, se reunió con la prensa fuera de la funeraria, y habló sobre la lamentable pérdida del actor, quien lamentablemente falleció el pasado 11 de septiembre. El también comediante sufrió una aparatosa caída en las escaleras de su casa que le provocó severas fracturas, que perdiera mucha sangre, y posteriormente, la muerte.
Reconoció el trabajo que su esposo realizó durante toda su vida, quien, no dejó de trabajar ni un solo día. «Toda una trayectoria en comedia, teatro, música. Es muy triste, fue un accidente fatal el que tuvo y que lo llevó a este triste final. Llegó ayer de los Ángeles, había ido a trabajar en la obra de teatro en la que estaba. No dejó de trabajar en ningún momento, lo hizo hasta el último momento de su vida».
Benito siempre fue una persona muy alegre, por lo que no quisieron despedirlo vestirlo de negro. «La verdad no queríamos ponerlo de negro ni nada. Entonces le pusimos algo muy relajado. Mi hija me pidió un saco rosa, una camisa blanca».
Al morir, solo pedía una cosa. «Que no lo cremaran, quería que lo enterraran. Se reúne con sus padres, sus hermanos, con toda la Dinastía Castro y con todos sus primos que también partieron antes que él». Sus restos serán llevados al panteón Jardín, donde están sus padres.
Agradece a amigos, familiares y fans, quienes han mostrado gran amor y respeto. «No paro de recibir mensajes, quiero agradecer sus muestras de cariño, el amor incondicional del público, el respeto por el dolor. En mi nombre y el de la familia les agradecemos.
Su deseo más grande es que siempre sea recordado con alegría. «Esperemos que lo recuerden como alguien que le gustaba hacer reír a su público y que siempre se entregó en el escenario».
Asimismo, confesó que todas las asociaciones a las que perteneció Castro le ha brindado apoyo a la familia. «La ANDA, la ANDI, compositores, todas las asociaciones a las que pertenecía nos han apoyado. Él era compositor, actor, músico, comediante, era multifacético, de esto vivió hasta el último día de su vida».
Benito no expresó más voluntades, pues no esperaba despedirse tan repentinamente, ya que gozaba de excelente salud. «Él no pensaba morirse pronto. Entonces, nunca dijo nada, la verdad esto nos agarró por sorpresa. A él mismo lo agarró por sorpresa».
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