Maribel Guardia intentará pasar una navidad tranquila y en armonía, a pesar del dolor que le causa la ausencia de su hijo, Julián Figueroa (q.e.p.d.).
De la pluma de Ricardo Escobar.
Maribel Guardia confesó que espera pasar unas fiestas decembrinas con la tranquilidad que le da la fe en Dios, aunque la ausencia de su hijo Julián es devastadora. «Tuve unas experiencias místicas preciosas con la Virgen, y eso me cambio el dolor, un dolor que no se lo deseo a nadie, es que te cambia la vida, te parte en dos, yo sé que mi vida nunca será la misma sin Julián«
Dijo que ya tiene un plan para pasarla en calma con su familia, en Costa Rica. «Si Dios quiere paso Navidad allá, voy a pasar Navidad con mi mamá allá. Regreso para hacer el maratón de Lagunilla mi barrio, vamos a estar del 26 al 30, y de ahí me voy con mi pequeña familia: mi nuera, mi sobrina, mi marido, nos vamos a ir a un paseo que nos hace falta».
Desmintió los rumores que aseguran se está divorciando. «La verdad que mi esposo ha sido una pieza muy importante en mi vida, un regalo porque desde que Julián estaba chiquito. Fue un segundo padre para mi hijo, tenía dos años cuando llegó a su vida».
Reconoció que respeta la tutela que tiene la mamá de su nieto. «Es el bebé de Imelda, lo amo con el alma, imagínate lo que representa ese niño. Entiendo que mi nuera está primero demasiado guapa, y que tiene derecho a vivir su vida. Le pido a Dios que Julián, desde el cielo, le busque un buen hombre para que los cuide a los dos».
Finalmente, deseó a su público felices fiestas y agradeció a todas aquellas personas que la han fortalecido con oraciones. «Lo sé y de esas oraciones me han llegado al corazón, al corazón porque sí, todo el cariño que he recibido de la gente, y en los momentos así uno lo agradece. Gracias que Dios los bendiga, lo guarde en la palma de su mano».
Es Maribel Guardia, una mujer de fe.
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